Tarta doble de calabacines

La tarta doble de calabacines es una tarta fantástica. Es deliciosa y muy sencilla de hacer, perfecta para comer en cualquier momento, sobre todo gracias a que se puede preparar con antelación.

Lo primero que se hará será la masa. Colocar la harina junto con la sal y un poco de pimienta en la procesadora, y agregar la mantequilla fría. Procesar hasta formar una especie de arenado. Incorporar entonces los huevos y el agua poco a poco hasta formar una masa que se desprenda del cuenco.
Volcar dicha masa sobre la superficie en que vayamos a trabajar espolvoreada de harina, y estirarla en forma rectangular, doblar al medio. Girar la masa y volver a estirar y doblar. Repetir este proceso una vez más.
Con la masa forrar un molde para horno. Presionar bien los costados y dejar caer más o menos 1 cm de masa fuera del molde. Pinchar la masa con tenedor para que no suba mientras la cocción, y cocinar en horno caliente hasta que este ligeramente dorada.

Mientras se cocina la masa hacer el relleno, se tiene que cocinar los calabacines hasta que estén tiernos pero sin que se desarmen, momento en el que los hay que retirar y cortar en rodajas finas. Colocar las rodajas en un colador para eliminar el líquido.
Por otro lado rehogar las cebollas en aceite hasta que estén tiernas. Retirar y reservar. Poner en un cuenco el queso crema, los huevos, queso rallado, almidón de maíz y las cebollas y condimentar y mezclar bien.

Para montar la tarta hay que alternar capas de calabacines y de la mezcla de huevos y queso sobre la masa. Se hagan las capas que se hagan, hay que terminar siempre con la preparación de huevos y queso. Se puede agregar un poco de queso rallado por encima antes de llevar al horno.
Llevar por ultimo al horno a cocinar a temperatura moderada a suave, unos 150º, hasta que el relleno este bien firme. Sacar entonces del horno y dejar templar antes de servir la tarta doble de calabacines.