Esta tarta de crepes con mousse de chocolate y grosellas es deliciosa tanto a la vista como al paladar. Si tienes algún evento especial, no dudes en hacerla y sorprender a todos tus invitados. El procedimiento es muy sencillo y ni siquiera necesita horno, ¡lo tiene todo!
Paso 1:
En primer lugar hay que elaborar los crepes. Tamiza la harina para asegurarte de que no tenga ningún grumo. Pon los huevos, la leche, el azúcar y el aceite de girasol en el vaso de la batidora y bátelos hasta conseguir una sustancia uniforme. Empieza a añadir entonces poco a poco la harina para que se vaya incorporando homogéneamente. Cuando tengas una masa cremosa, viértela sobre un recipiente, tápalo con papel film y deja reposar media hora en el frigorífico.
Paso 2:
Cuando transcurra el tiempo de reposo, calienta mantequilla en la sartén con un hilillo de aceite para que no se queme. Cuando se derrita y alcance temperatura, saca la masa de la nevera y viértela en pequeñas porciones en la sartén con ayuda de un cacillo. Extiéndela hasta que quede muy fina y espera a que cuaje; entonces, dale la vuelta. El primer crepe probablemente no salga muy bonito; puedes usarlo para la base. Repite el proceso hasta que acabes con la masa.
Paso 3:
El siguiente paso consiste en elaborar el relleno de chocolate. Prepara un baño maría cuidando de que no entre ni una gota de agua en el recipiente interior y derrite en él el chocolate negro de cobertura.
Paso 4:
Casca los huevos y separa las claras de las yemas. Reserva las yemas mientras montas las claras a punto de nieve tras añadirles el azúcar y una pizca de sal. Monta también la nata, que tendrá que estar muy fría, hasta que adquiera una consistencia esponjosa pero suave.
Paso 5:
Mezcla las yemas de los huevos con el chocolate fundido, incorpora la nata y finalmente las claras montadas, removiendo con movimientos suaves y envolventes hasta que esté todo perfectamente integrado.
Paso 6:
Monta la tarta colocando el crepe menos estético como base, recubriéndolo con una capa de relleno de chocolate y alternando capas de crepes y de relleno hasta cubrir con el último crepe. Lleva la tarta a la nevera.
Paso 7:
Para la decoración, disuelve el zumo de limón en la clara de huevo batiéndolo muy bien. Con un pincel o broca de cocina, impregna las grosellas bien lavadas y secas de la mezcla, aplicándole varias capas. A continuación, espolvorea azúcar sobre ellas para que se adhiera. Ya están listas las grosellas escarchadas.
Presentación:
Para servir tu tarta de crepes con mousse de chocolate y grosellas, sácala de la nevera y espera unos minutos para que se atempere. Decórala con las grosellas escarchadas y lista para hincarle el diente.
Sugerencia:
El chocolate negro especial para postres de DIA le proporcionará a tu tarta de crepes con mousse de chocolate y grosellas un relleno sabroso y delicado.
En Demos la vuelta al día: Postres de chocolate dignos de Willie Wonka