Setas gratinadas

Para preparar estas setas gratinadas con agilidad y sin perder el tiempo, lo mejor que se puede hacer es poner a calentar el horno a 180º antes de empezar a cocinar.
Echamos el aceite en una sartén y, cuando esté bien caliente, sofreímos en él la cebolla hasta que tome un color dorado. Entonces, se añaden las setas y se saltean durante unos minutos más para que suelten su agua. antes de sacar el sofrito d ela sartén, se salpimienta al gusto removiéndolo bien.
Colocamos la mitad de las lonchas de pan en la base de una fuente previamente engrasada. Encima del pan echamos la mitad de la mezcla de cebolla y setas, y la mitad del queso gruyere. Hacemos otra capa con el resto de ingredientes, y lo reservamos.
Batimos los huevos en un bol y los mezclamos con la leche, el requesón y el parmesano. A esta mezcla le echamos un poco de orégano, la sal y la pimienta, y la echamos sobre todos los ingredientes en la fuente.
Colocamos la fuente con las setas, espolvoreada con el resto del queso gruyere, al baño maría, y las dejamos en el horno durante unos 40 minutos.