Estas samosas de guisantes y patatas son la empanadilla triangular típica de la cocina india. Generalmente está rellena de vegetales, entre los que no pueden faltar la patata y los guisantes… aunque hay infinidad de variantes y rellenos, incluso de carne de cordero. Lo que es invariable: se sirven bien calientes, recién hechas y, sobre todo, bien crujientes. Un bocado sabroso que en la India se come habitualmente por la calle, en pequeños puestos callejeros y que se puede acompañar de una refrescante salsa de yogur, pepino y menta.
Paso 1:
Pela las patatas y las zanahorias. Acerca una olla con abundante agua al fuego y, cuando rompa a hervir, mételas. Cuece las patatas y las zanahorias hasta que estén bien tiernas. Cuando las pinches y compruebes que ya están, sácalas y deja que se enfríen. Una vez que estén lo suficientemente frías como para poder manipularlas sin quemarte, corta tanto la patata como la zanahoria en cuadraditos pequeños.
Paso 2:
En una sartén con un chorrito de aceite, pocha las cebollitas picadas en juliana. Cuando comiencen a estar un poco transparentes, añade las especias, es decir, la cúrcuma, el curry, la mostaza, la sal y la pimienta negra. Mueve un poco, y añade después los dientes de ajo muy picaditos, los guisantes y también las verduras cocidas. Sazona con el zumo de limón e incorpora unas hojitas de cilantro fresco.
Paso 3:
Coloca este relleno en medio de una empanadilla y cierra formando unos triángulos. Asegúrate de sellar bien con la ayuda de un tenedor.
Paso 4:
Fríe en una sartén con abundante aceite a fuego medio alto. Cuando estén doraditas, sácalas a un papel absorbente.
Presentación:
Sirve tus samosas de guisntes y patatas en una bonita fuente, recién hechas, y adorna con unas hojas de cilantro. Si quieres, puedes acompañar con alguna salsa como, por ejemplo, una rica y refrescante salsa a base de yogur y hierbabuena, o algún tipo de raita... ¡irresistibles!.
Consejo:
Si quieres darle a esta receta de samosas de guisantes y patatas el verdadero sabor de la India… que no te tiemble la mano al emplear el curry marca DIA. Tiene todos los sabores y aromas pero al mismo tiempo es suave y nada picante.
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