Rosquillas de anís

Las rosquillas de anís son un dulce muy típico que forma parte de la repostería española. En mi zona son muy típicos comerlos en la época de Semana Santa. En mi casa los solemos hacer el día del miércoles santo por la mañana. Os cuento como las hago aunque sigo la receta que me dio mi abuela y a ella su madre. ¡Están muy ricas!
Lo primero que haremos será poner en una sartén el aceite de oliva, la piel de la naranja y la piel del limón y dejaremos que se ponga dorado y coja el sabor el aceite.
Cuando esta lo pasamos por el colador y dejamos que se enfrié, mientras hacemos la masa de las rosquillas.
En un bol pondremos los huevos, el azúcar, el zumo de naranja, el aceite que ya tendremos frio y batiremos bien con las varillas de mano.
A continuación pondremos la harina, la sal y la levadura en un colador y tamizaremos y la echaremos junto los demás ingredientes, mezclaremos bien todo.
Pondremos harina en el mármol y volcaremos la masa y amasaremos, si está muy blanda le pondremos un poco mas de harina, tiene que quedar un poco blanda, no muy dura que sino luego quedan muy duras, dejaremos reposar 30 minutos tapada la masa.
A la hora de hacer las rosquillas si se te pegan en las manos la masa nos untaremos con aceite o con harina para hacer las rosquillas.
Como hacemos las rosquillas, haremos una bola no muy grande en el centro de la bola haremos un agujero, le daremos forma con los dedos.
Así tiene que quedar la rosquilla.
En una sartén onda añadiremos el litro de aceite de girasol, lo dejaremos que se caliente, cuando está caliente vamos echando las rosquillas que nos cojan.
Si el aceite está muy caliente lo bajaremos un poco pero no demasiado iremos controlando, cuando están doradas le daremos la vuelta y terminaremos de hacer.
Las sacaremos y las pondremos en un plato con un papel para que suelte un poco de aceite, antes de que se en fríen las pasaremos por la azúcar y la canela.
Después pasaremos las rosquillas de anís por el azúcar y la canela.
¡A disfrutar!