Pudin de vainilla y grosella

El pudin es una receta ideal para los amantes de los postres cremosos, suaves y como no, dulces. Además suelen ser unos de los dulces preferidos de los más pequeños de la casa. La receta de pudin de vainilla y grosella es una receta sencilla pero verdaderamente deliciosa. El pudin puedes prepararlo con ingredientes dulces o salados, nosotros vamos a preparar un estupendo postre con grosellas.

Paso 1:

Acerca al fuego una cacerola grande, añade la leche entera, el aroma de vainilla y remueve a fuego lento hasta que la preparación comience a hervir. El truco está en remover con bastante frecuencia, para que la leche no se queme y al empezar a hervir se salga fuera de la cacerola.

Paso 2:

En un pequeño bol añade el azúcar y la fécula de maíz y remueve bien. En otro bol bate las yemas y añade la mezcla de fécula y azúcar y remueve las yemas con el azúcar y la harina hasta que las yemas se blanqueen o sea, que cambien un poco de color.

Paso 3:

Retira la leche del fuego y deja enfriar unos 10 minutos aproximadamente, una vez que se haya enfriado la leche añádela a la mezcla preparada anteriormente y remueve bien. Vuelve a colocar en la cacerola para cocinarlo de menos hasta que gane una textura cremosa pero con alguna consistencia. Remueve sin parar porque esta preparación se pega en el fondo con mucha facilidad. Retira del fuego una vez que tengas la textura deseada.

Presentación:

Coloca el pudin de vainilla y grosella en recipientes individuales y corónalos con unas ramitas de grosellas. Su sabor un poco ácido va a contrastar con el dulce del pudin de vainilla. Mételo en la nevera aproximadamente dos horas y está listo para servir.

Sugerencia:

En las tiendas DIA puedes encontrar los dos ingredientes básicos para cualquier receta de pastelería, la leche entera y el azúcar granulado blanco DIA, dejaran todos tus postres perfectos. 

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