Pizza fácil
- Masa o base de pizza (1 ud.)
- Tomate frito (6 cucharadas)
- Orégano (media cucharilla)
- Queso mozzarella (rallado, al gusto)
- Aceite de oliva (un chorrito)
- Masa o base de pizza (2 uds.)
- Tomate frito (12 cucharadas)
- Orégano (1 cucharilla)
- Queso mozzarella (rallado, al gusto)
- Aceite de oliva (un chorrito)
- Masa o base de pizza (3 uds.)
- Tomate frito (18 cucharadas)
- Orégano (1 cucharada)
- Queso mozzarella (rallado, al gusto)
- Aceite de oliva (un chorrito)
¡Menos es más!, este eslogan es tan válido para la moda como para la gastronomía, o al menos para las pizzas. Una sencilla pizza margarita con tomate, mozarrella y orégano es, sencillamente, deliciosa.
Paso 1:
Si la masa de la pizza está congelada, sácala 15 minutos antes del congelador. Si, por el contrario es fresca, se puede utilizar tal cual.
Paso 2:
Precalienta el horno a 200° con la rejilla dentro.
Paso 3:
Extiende la masa de pizza en la encimera y esparce el tomate frito por encima insistiendo por toda su superficie, hasta los bordes. Pon el queso recubriendo bien la superficie pero sin llegar tan al borde como con el tomate. Por último, espolvorea el orégano por encima.
Paso 4:
Cuando el horno esté caliente, saca unas manoplas o trapo y saca, con mucho cuidado la rejilla. Pon la pizza encima y vuelve a meter al horno. Hornea la pizza entre 10 y 15 minutos. Es importante hacer bien la pizza y que su superficie esté bien doradita, pero que al mismo tiempo la masa esté crujiente.
Presentación:
Sirve tu pizza en una bandeja redonda, córtala en porciones… ¡y a disfrutar!
