Pie de limón

Este pie de limón es muy suavecito para tomar de postre después de una comida abundante. Yo, personalmente, necesito tomar algo dulce después de comer o cenar, ya sea fruta, yogurt o una tarta, pero necesito quitar el sabor salado.
En un recipiente, mezclar las galletas molidas, que se puede hacer con ayuda de un mazo o metiendo los paquetes en una bolsa y dándoles golpes contra una mesa, con la mantequilla derretida hasta obtener una pasta suave y bien integrada que será la base del pie de limón. Cubrir el fondo y los bordes de un molde engrasado con la mezcla de galletas y mantequilla, ayudando con las manos a distribuirla bien.
Por otro lado, mezclar la leche condensada con el jugo de limón con ayuda de una espátula de plástico, que la leche condensada es costosa. Echar el relleno de limón sobre la base de galletas y repartirlo bien por todos lados.
Por último, cubrir el pie de limón con el merengue, que se hace batiendo tres claras de huevo con seis cucharadas de azúcar hasta conseguir que las claras se queden bien montadas.
Meter el pie en la nevera varias horas antes de comerlo para que coja consistencia.