Ñoquis de patata con pesto casero

Receta de: Huevo y patata
Plato: Plato caliente, Plato único, Primer plato
Cocina: Internacional, Ligera
Ñoquis de patata con pesto casero
Media
31-40
151-300
Ñoquis de patata con pesto casero
Valoración media
Anterior receta Siguiente receta
Ingredientes
  • Patatas (300 gr)
  • Harina (70 gr)
  • Huevos (1 ud talla S sólo la yema)
  • Sal
  • Albahaca (40 gr)
  • Queso parmesano (50 gr)
  • Piñones (20 gr)
  • Ajo (1 pizca)
  • Aceite de oliva vírgen extra (40 ml)
  • Patatas (600 gr)
  • Harina (140 gr)
  • Huevos (1 ud talla L sólo la yema)
  • Sal
  • Albahaca (80 gr)
  • Queso parmesano (100 gr)
  • Piñones (40 gr)
  • Ajo (1/4 ud)
  • Aceite de oliva vírgen extra (80 ml)
  • Patatas (900 gr)
  • Harina (210 gr)
  • Huevos (2 uds talla M sólo la yema)
  • Sal
  • Albahaca (160 gr)
  • Queso parmesano (150 gr)
  • Piñones (60 gr)
  • Ajo (1/2 ud)
  • Aceite de oliva vírgen extra (120 ml)
Elaboración

Dos deliciosas insignias de la gastronomía italiana juntas en un mismo plato: ñoquis y pesto. Estos ñoquis de patata con pesto casero son una comida reconfortante y llena de ingredientes frescos y sabrosos que no sólo disfrutarás degustando: ¡los ñoquis son muy divertidos de cocinar!

Paso 1:

No vale cualquier variedad de patata para hacer ñoquis, de modo que tendrás que escoger bien. Las más indicadas son las patatas viejas, cuya textura harinosa permite trabajar mejor la masa. Existe incluso cierta predilección por esas patatas viejas que llevan ya un tiempo en casa y a las que les empiezan a salir “ojos”. Si no están demasiado mal, retírales los brotes y aprovéchalas para ñoquis.

Paso 2:

Pela las patatas, lávalas, sécalas cuidadosamente y córtalas en cubos de tamaño mediano. Cocínalas al vapor, ya sea con un accesorio específico o situándolas en un colador sobre una olla de agua hirviendo, cubriéndolo todo con papel de aluminio. Aguarda hasta que las patatas estén tiernas y bien cocinadas.

Paso 3:

Traslada las patatas cocinadas al vapor a un recipiente y tritúralas con un pasapurés o, en su defecto, con un tenedor. Escoge una superficie de trabajo amplia (puede ser desde un bol de buen tamaño hasta directamente una mesa), esparce harina por encima y coloca la masa de patata sobre ella.

Paso 4:

Puedes añadirle yema de huevo a tus ñoquis o puedes prescindir de ella. La masa con huevo dará lugar a unos ñoquis más manejables, de un tono más anaranjado y más pesados en el estómago. Sin huevo, los ñoquis tendrán un aspecto más pálido y resultarán más ligeros. Si decides echar huevo a tus ñoquis, cáscalo y hazlo pasar entre tus dedos entreabiertos con la palma de la mano hacia arriba. De este modo, separarás la yema, que quedará en tu mano, de la clara, que se deslizará hasta el recipiente que tengas preparado debajo. Añade la yema a la mezcla de patata.

Paso 5:

Muy poco a poco, ve añadiendo harina a las patatas. Aunque haya unas cantidades estipuladas, realmente cada patata es un mundo y es complicado calcular la hidratación del propio tubérculo o la cantidad de agua que absorbe o pierde durante su cocinado. Por eso, lo conveniente es ir añadiendo harina con cuidado hasta obtener una masa suave y elástica. Agrega también un poco de sal.

Paso 6:

Toma pedazos de masa y hazlos rodar sobre la superficie de trabajo hasta formar un cilindro con un grosor de centímetro y medio, aproximadamente. Corta esos tubos en porciones de un centímetro de largo. Espolvoréalos con harina para manipularlos mejor. Si deseas que tus ñoquis tengan esas decorativas rayas paralelas en su superficie, presiona suavemente con un tenedor hasta marcarlos.

Paso 7:

Pon a hervir abundante agua con una pizca de sal. Echa los ñoquis con mucho cuidado y, cuando estén todos dentro de la olla, remueve delicadamente un par de veces para separarlos sin estropearlos. Cuando empiecen a flotar hacia la superficie (lo que les llevará probablemente menos de un minuto), sácalos con una espumadera.

Paso 8:

Lava la albahaca, sécala completamente y deshójala. Colócala en un vaso de batidora junto al queso parmesano rallado, el ajo, los piñones y un poco de sal y tritúralos. Si resulta complicado por su sequedad, añade un poco del aceite reservado para la salsa pesto. Cuando hayas conseguido una textura de tropezones finos, empieza a agregar el resto del aceite en un hilillo mientras sigues batiendo para amalgamar la salsa. Deja de batir cuando esté integrada.

Presentación:

Sirve tus ñoquis de patata con pesto casero recién hechos, mientras aún están tibios, y disfruta de su textura suave y mantecosa alternada con el crujiente de los piñones.

Sugerencia:

Una cuña de queso grana padano de la gama Delicious de DIA en tu despensa te solucionará estos ñoquis de patata con pesto casero y otros platos igualmente deliciosos.

En Demos la vuelta al día: 9 maneras perfectas de arruinar la comida a un italiano