Mollejas de cordero en salsa con polenta

Las mollejas de cordero son mucho más suaves que las de ternera, dado que son unas glándulas que tienen los corderitos lechales... y por eso tienen un delicioso sabor a leche. Al contrario de lo que mucha gente piensa, no es nada complicado elaborarlas, y además es un producto económico y tradicional. Se pueden hacer simplemente salteadas con un poco de ajo y perejil, pero hoy os presentamos una elaboración mucho más elegante, con la que quedarás a las mil maravillas si tienes invitados: 

Paso 1:

En primer lugar vamos a preparar la salsa de vino dulce. Para ello, derrite la mantequilla en un cazo. Añade un chorrito de aceite y, cuando tenga temperatura, incorpora la chalota picada muy menuda. Deja que se haga a fuego lento. Cuando estén transparentes, blandas y un poco doradas, añade la canela, el azúcar y el vino dulce. Incorpora también el caldo de carne y deja hervir y reducir durante 15 minutos.

Paso 2:

Mientras tanto, vamos con las mollejas. Lo primero que hay que hacer es limpiarlas y prepararlas muy bien. Para ello ponlas en un bol con agua muy fría, con hielo, durante una hora, cambiando el agua y añadiendo más hielo a la mitad del tiempo. De esta forma, se eliminarán todas las impurezas y restos de sangre que pudieran tener.

Paso 3:

Después, sácalas y escúrrelas. Ahora tienes que limpiarlas. Con ayuda de un cuchillo o de unas tijeras, ve retirando todas las telillas que las recubren, así como restos de pieles o grasa. Finalmente, córtalas en trozos del tamaño de un bocado.

Paso 4:

Acerca una sartén al fuego con un hilito de aceite y saltéalas a fuego medio hasta que estén bien doraditas. En ese momento, con las mollejas bien crujientitas, incorpora la salsa, sube el fuego y sigue cocinando hasta que la salsa reduzca.

Paso 5:

Ahora, vamos con la polenta amarilla. Acerca un cazo al fuego con la leche, un poco de sal, pimienta negra recién molida y nuez moscada, a ser posible, también recién rallada. 

Paso 6:

Añade la mantequilla y la nata líquida, y cuando esté caliente incorpora la polenta, es decir, la harina de maíz amarillo, y mueve constantemente hasta obtener una masa homogénea.

Presentación: 

A la hora de emplatar tus mollejas de cordero en salsa con polenta, coloca un molde de aro en el centro del plato y rellénalo con la polenta. Retira el molde. Coloca las mollejas con su salsa alrededor de la polenta y listo. Puedes adornar con un poco de cebollino y con unas escamas de sal.

Sugerencia:

No dudes en emplear el aceite de oliva virgen extra de la nueva línea DELICIOUS a la hora de preparar estas mollejas de cordero en salsa con polenta. Y, por supuesto, para la salsa, apuesta por el caldo de carne DIA, que aportará un sabor suave y delicioso, sin robar protagonismo a las mollejas. Por otro lado, aunque podrás elaborar la salsa con cualquier vino dulce... nosotros te recomendamos emplear Pedro Ximenez.

Alternativa:

Cuando sea temporada de setas, a esta receta de mollejas de cordero en salsa con polenta le van genial las setas. No dudes en incorporar, por ejemplo unas colmenillas.

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