Mashmelos caseros

De pequeños todos hemos disfrutado mucho con esta golosina. A mí era de las que más me gustaba, en especial cuando era mi madre la que nos los preparaba. De ahí os presento esta receta de mashmelos caseros, para que los podáis disfrutar vosotros tantos como hacía yo de pequeña. Es hoy el día que los sigo haciendo para mis hijos como en su día los hacía mi madre para mí. Lo primero que hacemos es que las 5 cucharillas de gelatina sin sabor las tenemos que hidratar con un poco de agua, solamente un poco por encima de la gelatina. Mientras vamos a poner en un cazo la 1/2 taza de azúcar y cubrirla con agua, que no sobrepase mucho el azúcar. Se lleva al fuego hasta que hierva, y en cuanto esto haya sucedido, vertemos la gelatina. Y mientras esperamos a que vuelva a hervir, ponemos las claras en la batidora y las montamos a punto nieve. Con cuidado hay que añadir a estas claras el azúcar con la gelatina, que ya debe estar hirviendo, y seguir batiendo. En el momento en que ha entibiado un poco, y sin dejar de batir, echar esta mezcla en un molde cubierto de papel vegetal. Lo aplanamos bien, para que la superficie sea pareja, y rociar de coco rallado. Lo llevamos al congelador durante 1 hora o hasta que haya cuajado la mezcla. Cuando este cuajado, lo vamos a retirar del congelador, y lo sacamos del molde, volcándolo cara abajo para sacar el papel. Con ayuda de un cuchillo mojado lo cortamos en cuadrados del tamaño que se desee, los pasamos por coco rallado o almendra molida, y ya tenemos unos estupendos mashmelos caseros para comer.