Hígado encebollado al estilo de México

Hace unos años habíamos abandonado la casquería, pero en estos días hemos vuelto a recuperar los platos en los que era el ingrediente principal. Cuando era pequeña en mi casa era habitual comer hígado. Mi madre siempre insistía que la suya, de origen mexicanos, decía que era muy bueno para que creciésemos fuertes y sanos. Asique aquí te traigo esta receta de hígado encebollado a la mexicana, para que también crezcas sana y fuerte. El caramelo de la cebolla combina perfectamente con el hígado. No hagas ascos a este plato porque está muy bueno.
El hígado se pone en leche por una hora. Se deja remojando en leche para que se ponga más blando. Cuando pase ese tiempo, se seca y se le unta en harina, sal y pimienta.
En un sartén poner la mantequilla o el aceite y freír la rodajas de cebolla. Una vez que veamos que las cebollas ya están fritas, las sacamos y en esa grasa se añade el hígado a la sartén, friéndolo de ambos lados hasta que esté dorado.
Se le agrega el agua y las cebollas, se deja a fuego lento, tapado durante unos 20 minutos. Se le quita la tapadera y se deja otros 10 minutos más dejando que se evaporen los aguas y espese la salsita.
Pasado este tiempo lo sacamos del fuego y lo servimos. Yo suelo acompañar este hígado encebollado a la mexicana con unas patatas fritas y unos guisantes, así lo convierto en plato único.