Este helado de chocolate sin lactosa me suele sentar mucho mejor que el normal y, además, me encanta su sabor.
Se coloca la leche y la nata en un cazo, y se deja calentarse a fuego lento. Cuando dé el primer hervor, se añade el cacao y se mezcla bien todo. Además, se echa el chocolate, la sal y la vainilla, y se mezcla hasta que el chocolate se derrita por completo.
En un bol aparte se mezclan las yemas de los huevos con el azúcar, y se añade a la mezcla de chocolate, removiendo unos minutos hasta que espese un poco. Entonces, se retira del fuego y se deja enfriar por completo.
Se envasa el helado de chocolate sin lactosa en un recipiente con tapa, y se deja en el congelador por lo menos 12 horas, removiéndolo en las tres primeras horas de vez en cuando para que no se cristalice.