Garbanzos en salsa de tomate

Los garbanzos en salsa de tomate es una receta que incluye tal variedad de ingredientes que termina siendo muy completa y nutritiva. Además de esto, es práctica porque llena lo suficiente como para tomarla como plato único.

En primer lugar, poner a remojo los garbanzos en agua la noche anterior para que se ablanden, es decir, premeditar que vas a comer este plato.
Al día siguiente, lavar los garbanzos en otro agua y ponerlos al fuego con la sal y agua en abundancia. Dejarlos cocer hasta que los garbanzos estén listos.
Una vez guisados los garbanzos, hay que escurrirlo bien.
Por otro lado, en otra sartén con aceite bien caliente, hacer una fritura con la cebolla, el pimiento, el tomate y los ajos, todo ello pelado y picado previamente. Agregar la pimienta, la sal y los clavos de olor al gusto. Una vez que las verduras están pochadas y conseguida una especie de salsa de tomate, se echa el pimentón, el vino, el tomillo, el laurel y la tacita de caldo y se remueve bien. Se deja al fuego durante unos minutos para que se adhieran los nuevos sabores y olores a la salsa.
Cuando esté cocinada triturarla con ayuda de una batidora, aunque si se prefiere se puede dejar así. Se vuelve a llevar al fuego.
Por último se echan los garbanzos, y se deja unos minutos al fuego.
Para terminar los garbanzos en salsa de tomate, solo queda probarlo por si fuera necesario rectificar de sal.
Se lleva a la mesa cuando aún está bien caliente.

Si se quiere hacer de éste un plato más completo, puedes añadir algo de carne, que pondrás a cocer junto con los garbanzos para que se haga al mismo tiempo, y luego lo desmenuzas para añadirlo al final a la salsa de tomate.