Empanada gallega de pisto

Por norma general estamos acostumbrados a que la empanada gallega este rellena de algún tipo de pescado o marisco, ya que estos son los productos estrella de esa tierra. Lo que os propongo hoy es una empanada gallega de pisto, sin carne ni pescado, por lo que totalmente apta para vegetarianos, y que posee un sabor realmente rico.

En primer lugar vamos a hacer la masa para lo que tenemos que mezclar en un cuenco la harina y la levadura disuelta en u poquito de agua caliente. Añadimos el agua, el vino blanco, el aceite y la sal.
Amasamos todo bien hasta conseguir textura de masa y reservamos en el cuenco tapado durante unos 30-40 minutos, hasta que más o menos doble su tamaño.

Mientras vamos a ir haciendo el relleno, para lo que tenemos que poner a cocer los dos huevos en un cazo con agua. En cuanto estén, los dejamos enfriar, pelamos y picamos.
Por otro lado picamos las verduras y las ponemos a pochar en una sartén con un poco de aceite de oliva. En cuanto estén, las retiramos, escurrimos del exceso de aceite.

Cuando haya pasado el tiempo de reposo de la masa, la dividimos en dos y estiramos una de las partes. La ponemos sobre la placa de horno y procedemos a echar el pisto de verduras sobre ella, por toda la superficie de una forma pareja pero dejando los bordes libres.
Picamos el huevo y lo repartimos. Ahora ponemos la otra parte de la masa estirada cubriendo todo el relleno, y cerramos los bordes de la empanada, asegurándonos de que no se pueda salir el relleno. La pintamos con un poco de huevo batido, para que coja un color brillante.
Lo llevamos a hornear a una temperatura de 200º hasta que veamos que la superficie ha adquirido un bonito color dorado.

Esta empanada gallega de pisto es deliciosa, y espero que os guste.

Trucos y consejos:
El horno debe de estar caliente antes de meter la masa, por lo que es conveniente que lo encendáis unos 10 minutos.
Podéis echar otras verduras, e incluso si no os importa un poco de atún en conserva.