Crumble de manzana

He de decir que, a mi parecer, el crumble de manzana es uno de los postres más buenos que te pueden servir en cualquier lado. Y como a mí no me sirve cualquier lado, lo hago yo en casa y lo como cuando me apetece. ¡Aquí tenéis la receta!
Lavamos la manzana, le quitamos la piel y la partimos en trozos pequeños. Ponemos los trozos de manzana en una olla junto con la ginebra, la tónica, el agua y la canela. Lo dejamos cocer a fuego lento hasta que la manzana esté tan blanda que se haga puré.
Una vez deshecha la manzana, retiramos la canela de la olla y agregamos el azúcar. Lo removemos bien y dejamos que se siga cociendo hasta que consigamos una pasta gelatinosa. Entonces, la retiramos del fuego y la dejamos enfriar.
En un bol, desmigamos el pan en trozos muy pequeños. En una sartén ponemos la mantequilla y salteamos las migas de pan hasta que se doren. Una vez listas, las sacamos a un plato con papel absorbente.
Para montar el crumble, ponemos una capa de migas, una buena capa de la crema de manzana encima, y otra capa de migas para terminar.