Casi cualquier persona frunce el ceño ante la mención de una merienda infantil, habitualmente llena de colores brillantes, azúcar procesado, grasas hidrogenadas y griterío, mucho griterío. ¿Por qué no darle la vuelta a las cosas e imaginar una merienda llena de colores pastel en un mudo encantado mitad británico mitad feérico? Una merienda en un mundo mágico escrito por Enid Blyton e ilustrado por Beatrix Potter en la que estos cotton cupcakes fueran el manjar principal de la mesa. Déjate llevar por la fantasía y elabora estos pastelitos de ensueño.
Paso 1:
Precalienta el horno a 200ºC. Es importante que esté a la temperatura adecuada cuando vayas a introducir la masa de tus cotton cupcakes.
Paso 2:
Tamiza en un mismo recipiente la harina, la levadura química y el bicarbonato. Es conveniente que no te saltes este paso para asegurarte una textura suelta y sin grumos. Mézclalos muy bien.
Paso 3:
Con ayuda de unas varillas, bate con energía las claras de huevo y el azúcar hasta dejarlas semimontadas. Este paso te resultará mucho menos trabajoso si empleas unas varillas eléctricas.
Paso 4:
Vuelve a las varillas de mano y remueve todo el tiempo mientras agregas poco a poco los ingredientes secos que has tamizado previamente a la mezcla de claras de huevo y azúcar.
Paso 5:
Integra la mantequilla en pomada (esto es, a temperatura ambiente y con textura de crema), el yogur, también a temperatura ambiente, y la mitad del aroma concentrado de algodón de azúcar e incorpóralos a la masa batiendo suavemente con una espátula de silicona.
Paso 6:
Si quieres cotton cupcakes de colores diferentes, separa la masa en recipientes distintos y añade a cada uno una gota del colorante que prefieras. Usa muy poquita cantidad para teñirlos de los tonos pastel propios del algodón de azúcar. Si quieres un extra de esponjosidad, deja reposar la masa durante dos horas en el frigorífico.
Paso 7:
Vierte la masa en cápsulas de cupcake previamente preparadas en molde de metal o silicona. No las llenes enteras para que no se derramen al crecer: deja libre un tercio de su capacidad. Dispón los moldes en una bandeja de horno y mételos en el horno precalentado. Tras los primeros 5 minutos, baja la temperatura a 180ºC y hornea tus cotton cupcakes durante 20 minutos más o hasta que al pinchar con una brocheta salga limpia. Sácalos y déjalos enfriar sobre una rejilla.
Paso 8:
Mientras se hornean los cotton cupcakes, prepara la cobertura de mantequilla o buttercream. Bate enérgicamente y durante largo rato (mejor con unas varillas eléctricas) la mantequilla en pomada con el azúcar glas y la otra mitad del aroma concentrado de algodón de azúcar. Si quieres coberturas de colores diferentes, cuando esté hecha la crema sepárala en recipientes diferentes, añade a cada una un poquito de colorante y vuelve a batir.
Presentación:
Sirve tus cotton cupcakes en papeles de colores claros con una buena cucharada de cobertura por encima (haz que vaya a juego con el color de la magdalena o combina los tonos para que tu bandeja parezca una paleta multicolor). Adórnalos con trocitos de fruta desecada.
Sugerencia:
El secreto para conseguir la extraordinaria esponjosidad de estos cotton cupcakes está en la levadura química. Confía en las latas de levadura en polvo DIA para conseguir excelentes resultados sin problemas.
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