Confit de pato con compota de manzana

El confit de pato con compota de manzana que os traigo hoy puede que sea uno de los platos más deliciosos que haya probado nunca. La carne de pato se deshace en la boca, y junto con la dulzura que aporta la manzana resulta un plato exquisito. No sólo conquista paladares sino también corazones.
En primer lugar precalentamos el horno a 200grados, sacamos los Confit de sus bolsas, limpiamos de grasa, los metemos en el horno una vez tengamos la temperatura adecuada y les dejamos unos 15 minutos, después de ese tiempo, los gratinamos y reservamos en caliente.
Mientras, hacemos la compota de Manzana, por lo que las lavamos, quitamos la piel, descorazonamos, cortamos a cuartos y frotamos con el limón para que no se oxiden, las metemos en un cazo al fuego junto con un poco de azúcar y la canela, removemos y añadimos el vaso de agua, removemos y tapamos dejando a fuego medio tirando a bajo durante media hora. Una vez pase este tiempo sacamos la manzana del cazo y reservamos.
Ahora es el momento de servir nuestro confit de pato con compota de manzana. Para ello ponemos en un plato una base con la manzana y sobre ella ponemos el confit. Delicioso.

Normalmente en las bolsas en donde viene el Confit suelen poner las instrucciones para cocinarlo, ya viene precocinado por lo que los tiempos en el horno son bajos.
Si quieres, en lugar de dejar la manzana entera, puedes triturarla a modo de puré. A mí me gusta dejarla entera para poder pincharla con el tenedor a la vez que cojo un trozo de pato.
Si queremos completar aun más este plato, lo que podemos hacer es freír unas patatas en la grasa que hemos quitado en un principio al confit de pato. Para ello pelamos y lavamos las patatas, las cortamos a trozos y las ponemos en una sartén con la grasa que habíamos reservado de los confit, si es necesario añadimos un poco de aceite de oliva y las freímos hasta que estén doradas, la grasa del Pato les da un sabor exquisito, una vez retiradas del fuego las dejamos sobre un papel de cocina para que eliminen el exceso de grasa sobrante.