Conejo en salsa con rovellons

El otoño es sinónimo de setas. Una de las más sabrosas y que se encuentran por mi zona son los rovellons, asique el sábado pasado cogimos una cesta y subimos al monte a por unos cuantos, con los que luego preparamos este delicioso conejo con rovellons en salsa. Os paso la receta para que no dejéis de hacerla. ¡Ya veréis como os encanta!
Poner en una cazuela, aceite y cuando esté caliente, poner el conejo troceado salpimentado y enharinado (sacudir la harina antes de ponerlo a freír) (Reservar el hígado del conejo, se necesita para la salsa)
En la misma sartén, añadir la zanahoria los ajos la cebolla, el tomate y el pimiento troceado. Rehogarlo todo.
Cuando esté dorado el conejo, ponerle el vaso de vino y cuando lo haya consumido, añadir vasitos de agua de los pequeños poco a poco. Espolvorear con un poco de albahaca, orégano y perejil.
En un mortero, picar las avellanas y las almendras junto con el hígado de conejo frito, y añadirlo a la cazuela. Cuando esté todo cocido, pasar las verduras y la salsa junto con el hígado por la batidora o si prefieres que la salsa no quede tan fina por el pasapuré. Tiene que quedar una salsa espesa, si es necesario espesarla con harina.
Limpiar los rovellons y partirlos al gusto (si son de los de botón, pequeños, dejarlos enteros).
Poner en una sartén aceite y cuando esté caliente saltear los rovellons y salpimentarlos. Cuando se haya reducido el agua que dejan, añadir un poco de la salsa del rustido del conejo y rehogarlos en ella, añadir agua hasta que están tiernos. Retirarlos del fuego.
Si se sirve en bandeja en la mesa, poner el conejo con la salsa y los rovellons por encima. Los rovellons, también se pueden hacer a la plancha con ajo y perejil y servirlos en una bandeja ó bol aparte. Servir caliente.

Los rovellons también son conocidos como níscalos en otras zonas.