Bizcocho de limón clásico

A pesar de la simplicidad del bizcocho de limón clásico, sigue siendo mi preferido. Me encanta cocinar repostería pero creo que, a veces, las cosas simples se quedan en el olvido y no hay nada mejor que mojar en un café un trozo de bizcocho por la mañana y llenarnos de energía para el día sin tener que meternos al cuerpo algo muy grasiento o que nos empache.
Para hacer el bizcocho mezclamos, en un bol, el yogurt y la mantequilla derretida y lo mezclamos bien con una cuchara. Añadimos el azúcar, la harina y la levadura. Lo mezclamos bien con ayuda de la cuchara o la espátula de plástico, y echamos la esencia de limón. Con ayuda de la batidora eléctrica, lo mezclamos todo hasta obtener una pasta homogénea.
Elegimos el molde para nuestro bizcocho y lo untamos con mantequilla o lo cubrimos con papel para hornear. Vertemos la masa dentro y dejamos que cubra bien todos los rincones del molde.
Ponemos el horno a 180º y lo metemos 30 minutos. Antes de sacarlo, comprobamos que está hecho. Para ello, metemos un cuchillo de hoja lisa y si sale limpio, podemos sacar el bizcocho y dejarlo enfriar antes de comerlo.