Arroz con pollo y gambas

No me suelo complicar demasiado la vida, y cuando hago un plato de arroz con pollo y gambas suelo hacer en la cantidad necesaria para que se convierta en plato único. Y es que en platos como este arroz con pollo y gambas, al estar tan ricos, no te cansas, por lo que si te quedas con hambre siempre repites.

Se hace de una forma muy sencilla, y la verdad es que no se puede tener mejor resultado. Pruébalo y ya verás cómo me das la razón.

En primer lugar hay que poner a hervir el pollo en una olla durante unos 10 minutos, tiempo tras el cual se saca el pollo y se desecha el agua con grasa de ese primer hervor.
A continuación vamos a agregar agua hasta cubrir de nuevo el pollo, salpimentar, y agregaremos el orégano y lo llevamos hasta que vuelva a hervir.
Cuando veamos que el pollo está casi listo, agregaremos un poco de pimentón, zanahoria los pimientos y lo dejamos terminar de cocinar.
Una vez que veamos que está listo el pollo, lo retiramos de la olla, y en esa misma agua de la cocción vertemos el arroz, dejando que continúe la cocción hasta lograr el punto. El arroz ha de quedar suelto.
Antes de que se termine de hacer el arroz, volvemos a echar el pollo junto con las colas de las gambas, dándole a todo una serie de vueltas para que se mezcle.
El arroz con pollo y gambas lo servimos en una fuente rociado con perejil.

Consejos:
Podemos además espolvorear por encima abundante queso, lo que le daría un toque diferente y un pelín salado.