Albóndigas guisadas en salsa

Las albóndigas guisadas en salsa quedan bien ricas, así que aquí te dejo la receta por si te apetece probarlas o por si necesitas hacerlas. Estoy segura que con ellas vas a triunfas se las prepares a quien se las prepares.

Para hacer las albóndigas mezclamos en un bol la carne picada de cerdo y de ternera con las manos, que es como mejor se maneja. Añadimos a la carne el perejil, el ajo picado y la sal al gusto, y lo volvemos a mezclar bien amasando para que se impregne bien todo. En un cuenco con 40 ml de leche ponemos el pan y lo dejamos que se empape. Lo escurrimos un poquito en papel absorbente y lo añadimos a la mezcla de las albóndigas. Echamos, además, el huevo, y lo mezclamos todo con una cuchara, que éste último es un poco pringoso. Cubrimos el bol con papel transparente y lo dejamos en la nevera por lo menos dos horas para que la carne se macere bien en el resto de los ingredientes.
Una vez pasado este par de horas, damos forma a las albóndigas, las enharinas sacudiéndolas del exceso y las freímos en una sartén con aceite bien caliente hasta que queden doraditas.
Según se van haciéndolas vamos reservando en un plato.
En esa misma sartén con el aceite de freír las albóndigas, echamos los dos dientes de ajo bien picaditos. Cuando empiecen a dorarse, echamos la harina y la rehogamos para que pierda el sabor a crudo. Echamos el pimentón, unas vueltas y agregamos rápidamente el caldo de pollo evitando así que se queme el pimentón. Lo damos unas vueltas para conseguir una salsa espesa. Salpimentamos y dejamos cocinar durante unos minutos.
Pasado ese tiempo, echamos las albóndigas junto a la salsa y dejamos que se cocinen todo junto durante unos minutos, tras los cuales ya podemos servir estas deliciosas albóndigas guisadas en salsa.